Animal cautivo

Hay que asumir que se es un animal, cautivo, entre los límites poco claros del espacio cibernético, universal, dudosamente real. Soy un animal... sólo tengo esa certeza y no me queda otra alternativa que escribir poesía para humanizarme. Tal vez debo decir solamente Escribir. Sé que no es la mejor manera para instalarse en un blog dispuesta a cazar espíritus. Pero tengo un hambre de pasión metafísica que convierte en Dios todo lo que toco.

jueves, enero 05, 2006

Ilusionismo

La cuerda púrpura
del horizonte
desaparece
Las murallas de la tierra
se sostienen en la noche
abrazadas de columnas
y graffiti
El tiempo suelta esa bruma
ácida
que deja los ojos helados
Es el mejor momento
para
hacer sonar las cadenas
de fantasma
o hacer llover
Sacar conejos de un sombrero
y flores frescas
beber en las copas labradas
de la baraja
dar con la fórmula del oro
o citarse a ciegas con el genio
de la lámpara oriental

Es el mejor momento
para escaparse del cuento
y empezar otra vida